El 11-S trajo consigo una serie de impactos que cambiaron por completo la economía global. Según la encuesta del Centro de Investigaciones Pew, se demostró que el 93% de los estadounidenses mayores de 30 años recuerdan claramente donde se encontraban aquel día.
Desde mediados de los 2000, la economía de Estados Unidos ya venía sufriendo debido a la burbuja inmobiliaria de las puntocom. El primer impacto se manifestó en los mercados de valores de Nueva York. Las empresas más afectadas fueron las aerolíneas, American Airlines y United Airles, las cuales experimentaron caídas significativas de hasta el 40 %.
Tras este atentado, numerosos aspectos son los que han cambiado el mundo en los últimos 20 años:
- La globalización de una "amenaza"
Los ataques del 11-S, llevaron a intervenciones militares en Afganistán e Irak, marcando un cambio en la política exterior de varias naciones. El informe del CFR estima que de 2019 a 2020, Al Qaeda y sus afiliados tuvieron su base en 15 países. Mientras tanto, la guerra de Irak creó las condiciones para el surgimiento del Estado Islámico, que controló grandes zonas de Irak y Siria y llevó a cabo numerosos ataques en todo el mundo. También se produjo una reconfiguración de alianzas y relaciones diplomáticas para hacer frente a las amenazas terroristas. Al mismo timepo, bajo la inspiración de los yihadistas, se registraron en varios países varios ataques mortales y planes de ataque que fueron fustrados a tiempo. Diversas ciudades europeas se vieron afectadas por estos ataques que estaban vinculados a extremistas y partidarios del islamismo.
- Islamofobia y Discriminación
A pesar de los esfuerzos de la comunidad musulmana por distanciarse del extremismo yihadista, los musulmanes en Estados Unidos han experimentado un aumento de islamofobia desde los ataques del 11-S. Los crímenes de odio a la comunidad musulmana en Estados Unidos aumentaron significativamente, pasando de 28 en el año 2000 a 481 en 2001. Aunque en los años posteriores estos crímenes disminuyeron, la comunidad musulmana también se vió afectado, pues enfrentó y sufrió diversas discriminaciones durante todos estos años.
Como resultado de la propagación del odio, tanto en Estados Unidos como en varios países del mundo, las Naciones Unidas respondieron a las amenazas que atentan contra la seguridad, adoptando medidas que apuntaban desproporcionadamente a los musulmanes. Sobre todo se implementaron normativas más estrictas en la seguridad del transporte áereo y en las fronteras para prevenir actos terroristas.
- Seguridad y protección digital
La protección de datos también se deterioró. La aprobación de la Ley Patriota cambió significativamente el equilibrio entre la privacidad y la seguridad nacional. Esta ley otorgó a los funcionarios del gobierno nuevos poderes para supervisar amenazas potenciales, permitiéndoles solicitar permiso al Tribunal de Vigilancia de Inteligencia Extranjera para controlar llamadas telefónicas, correos electrónicos y mensajes de los estadounidenses, entre otras cosas. Esto generó debates sobre la privacidad y llevó a una reconsideración de los equilibrios entre la seguridad y las libertades de los ciudadanos.
Con la llegada de los smartphones, las autoridades desarrollaron nuevas herramientas para controlar a personas específicas y rastrear su ubicación mediante geolocalización. En conjunto, estas medidas han ampliado los poderes de vigilancia masiva del gobierno.
Otros países alrededor del mundo, también aprovecharon estas nuevas capacidades tecnológicas de vigilancia, como el uso de cámaras de vigilancias en espacios públicos o programas de reconocimiento facial, siendo China el líder mundial.
En conclusión, el atentado del 11-S dejó un impacto profundo y duradero en diversos ámbitos de la sociedad global. Desde cambios en las políticas de seguridad y privacidad hasta transformaciones económicas y el surgimiento de desafíos como la islamofobia. Aunque se fortalecieron las medidas antiterroristas, también surgieron dilemas éticos y debates sobre derechos humanos. La memoria del 11-S continúa en la conciencia colectiva, recordando el complejo significado de este día en la historia contemporánea.
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